lunes, diciembre 10, 2007

EL HOMBRE MASTERCARD


He descubierto que soy el hombre Master Card.


El sábado, harto de estar pone y quita el martillo de la pesa que regula el agua en mi retrete, me armé de paciencia, una escalera, alicates, perico, destornillador y pinzas, así como un mecanismo nuevo para retretes.


Les contaré primero como está distribuído mi edificio, imaginen una H, bueno uno de los "palitos" largos de la H es la fachada de mi edificio, abajo está la estética, luego las azafatas, después su servidor y arriba las jaulas de tendido, el "palito" corto es el pasillo que une la fachada con la parte de atrás que son otros departamentos.


Bueno, al lado del "palito" corto está la cisterna del edificio, una torre de concreto altísima, que sobresale casi 4 metros por encima de las jaulas de tendido.


Bien, una vez hecha esta aclaración les contaré. La cisterna tiene 3 llaves de paso del agua, una está en la toma central, la que necesitaba que mi casero cerrara para arreglar mi retrete, sin embargo, el portero me avisó que sobre la cisterna había un par de llaves más que cortaban parcialmente el flujo del agua asi no dejaría sin el suministro a todos los inquilinos.


La llave que me corresponde nos dejaría sin agua solamente a las azafatas, a los de la estética y a mi. Podría haber sido mal vecino y quitar el agua para remediar mi problema a la brevedad, pero lo cierto es que no soy ningun cavernícola y aunque me hayan hecho pasar noches de insomnio, decidí darles una muestra de lo que es tener un vecino civilizado.


Esperé hasta las 8 pm, hora en que las sobrecargo ya se habían ido y la estética ya estaba cerrando. Saqué la escalera y demás aditamentos... acomodé la escalera sobre la torre de la cisterna y me di cuenta que restaban algo así como 2 metros para poder llegar a la cima...


Para mi suerte había una lamina salida de la cual podía afianzarme para subirme casi casi trepando hacia la parte superior de la cisterna, tuve, desde luego, que hacer fuerza con los brazos para impulsar mi cuerpo hacia el techo de la cisterna, de lo contrario, enfrentaría una caida de casi 4 metros... pero en el momento no pensé en lo delicado de esa situación.


Al hacer fuerza, me rasgué la piel de ambos antebrazos que comenzaron a arder y sangrar casi de inmediato... ya una vez arriba me dediqué a buscar la dichosa llave, se que encontraba nada más y nada menos que casi al borde del abismo entre el pasillo y las dos areas de departamentos...


Sufro de un vértigo tremendo y de agorafobia para acabarla de amolar... así que se imaginarán lo mucho que me costó acercarme hasta el borde y girar una perilla dura como una piedra cuasi suspendido a por lo menos 30 metros de altura en plena oscuridad. El caso es que al fin pude cerrarla y entusiasmado, pero adolorido me dispuse a bajar para cambiar las piezas en mi retrete...


Lo que había olvidado es que la escalera quedaba dos metros por debajo de mis pies... asi que me puse a imaginar como alcanzar la escalera sin caerme, o sin tirarla... en ambos casos, sin matarme...


No me quedó de otra que colgarme literalmente por la pared...y dejarme caer con la mejor esperanza de que la escalera no diera con mis huesos en la azotea. Para mi suerte la escalera estaba bien fija asi que caí sin mayor problema y ya una vez abajo, fui a mi depto a corroborar que no hubiera agua...


Vacié el tanque del retrete y para mi gusto ni una gota se escurrió cuando quité el martillo, separé la válvula del tubo y para mi agrado vi que no salía agua como fuente.


Me dispuse entonces a desmontar la caja del resto del retrete, fue algo dificil, ya que era tubería de cobre soldada por años y años de óxido. finalmente pude cambiar la pieza que goteaba, pero no la del tapón, que tenía una tuerca enorme, mucho más grande que un puño, y no tenía la herramienta necesaria para cambiarla.


Al momento de recostar la caja para hacer las nuevas conexiones el remanente del liquido escurrió y me empapó por completo, incluído un baño en gel azul muy viscoso... y es que nadie dice que le pasa a las pastillas Pato Purific tras dos meses bajo el agua....


Una vez cambiados los empaques, mangueras y tubos, volví a montar todo en su lugar, en medio de un charco azul en el piso de mi baño. El lugar era una cochinada, el piso encharcado, piezas enmohecidas y podridas por todos lados, herrumbres oxidadas, tuercas, herramientas...


Terminé, no sin cierto esfuerzo de volver a montar la caja... (¿por qué las cosas son siempre más fáciles de desarmar que de armar?) conecté la toma de agua y una vez cerciorado de que no había olvidado atornillar ni una sola pieza, me dirigí de nuevo a la azotea.


Volví a subir por la escalera, volví a impulsarme con los brazos, acentuando y agrandando las heridas de mis antebrazos, que me ardían como demonios por el contacto con el gel de la pastilla purificadora.


Abrí el paso de agua y nuevamente me descolgué por la pared para dejarme caer sobre la escalera, esta vez el descenso no fue de 10 como la vez anterior, me raspé la rodilla con la pared en la breve caída...más sangre...


Bajé corriendo hasta mi depto, alarmado por alguna mala conexión que pudiera haber estado inundando mi baño, mi sala y demás... afortunadamente el tanque ya se había llenado y el flotador nuevo había cortado el paso de agua automáticamente... Mi baño funcionaba de nuevo!!!


Conseguí hilo de cáñamo para el tapón de la caja y lo até firmemente a la palanca, probe un par de veces y todo quedó en orden... terminé mi labor a las 10:25 pm...


Se preguntarán que por qué el hombre Mastercard como título para este post... bueno ahí les va


Escalera: 800 pesos

Alicates: 60 pesos

Mecanismo para retrete: 100 pesos

Destornillador: 20 pesos

Pinzas: 45 pesos

Perico: 75 pesos


Que te subas por una pared imposible para pelarte los brazos y una rodilla, pararte al borde de un abismo, hacer saltos suicidas mancharte de pato purific, machucarte un dedo, mojarte y correr como loco para ver que no se tiren 6 litros de agua, no tiene precio.


Saludos y Hasta la Próxima!


P.D. hoy también me entregaron mi carro, ya tiene mofle, me salió en mil 200 pesos... (120 dólares para el público internacional)