Y apenas ahora entiendo por que Jaime el del comercial de Tang ponía cara de "cómo joden estos escuincles"...
De acuerdo con el psicólogo y terapeuta argentino Jorge Bucay, los seres humanos aprendemos a decir las mismas tres palabras en el mismo orden y sin importar el idioma que se hable.
La primera es: mamá... la segunda es: papá... y la tercera es: MÁS...
Si... más... ¿más de que? quién sabe... creo que nadie lo sabe...
El caso es tener más... ser más... parecer más... obtener más... lograr más... destacar más...
No me malinterpreten... esto no necesariamente tiene que ser malo (ya escuchaba a lo lejos a los que viven para ser dueños del mundo apuntando con el dedo y diciendo "conformista, conformista, conformista), pero tampoco tiene que ser bueno del todo....
Es bueno crecer... darle significado a la vida, tener un rumbo... buscar una dirección. Pero no nos confundamos... Tener un carro 2009 no es el rumbo, es una meta... tener un puesto directivo no es el rumbo... es una meta...
Y sucede pues que vamos acumulando metas, cumplidas e incumplidas y creemos que ese es el sentido de la vida...
Mientras más haya logrado, mas exitoso soy... soy más admirado, más envidiado, más respetado, más querido....
Pero... ¿Estoy más cerca de lo que quiero para mi vida? Creo que la mayoría de nosotros tendremos en un acto de honestidad absoluta decir que no...
El gran Groucho Marx señalaba en uno de sus monólogos cómicos a principios del Siglo XX: "Si le preguntan a cualquier tipo cuál es la vida ideal, les contestará que consiste en tener un salario 100 dólares más alto que su cuñado y haberse casado con la hermana más guapa"
Más... más... más...
Y el tema acá es que comenzamos a estructurar nuestra felicidad con base en lo que tiene el vecino... en lo que mis padres esperaban de mi... en lo que mi pareja quiere que sea... e incluso en lo que mi trabajo exige de mi...
Pero ¿y lo que yo quiero donde queda?
¿Qué es lo que me hace feliz a mi?
He decidido que a partir de hoy, con esta brújula que recién encontré por fin podré perseguir mi rumbo y darle un significado a mi vida... No, no se confundan... no seré el Dalai Lama mexicano... ni Gobernaré al Mundo... Ni seré inmensamente rico...
Seré yo... y con eso debe bastar....
Dejaré de saborearme la sopa en el plato de mi vecino... y veré que tan rica está la mía... y si no me gusta... haré que me la cambien...
Mi felicidad depende de mi... y para eso debo darle un significado a mi vida... es única e irrepetible... que desperdicio vivirla alimentandose de felicidades ajenas ¿no creen?
La ecuación es sencilla:
Lo que tengo - lo que tienen los demas = insatisfacción. Y así... nos lavamos el cerebro y nos decimos que es imposible ser felices...
Si la ecuación fuera:
Lo que soy - lo que tengo = satisfacción.
¿Por qué a los 9 meses ya sabemos decir "más"?
¿Y por qué al morir queremos ser sepultados en mausoleos de mil 500 dólares?
¿¿Siempre más y más??
Para mi ya no...
De hoy en adelante para mi será:
Aquí estoy... y mi camino es lo que me llena, lo que me hace sentir pleno, lo que me complementa.
Si eso no me da más de todo (poder, placer, adulación,) no importa..., si eso no llena las expectativas que los demás pusieron en mi (padres, amigos, etc) no importa...
Lo importante es que seré yo, haré lo que me llena y eso me tendrá satisfecho.
¿Para qué voy a seguir acumulando más "más" si en realidad al restarlos de lo que quiero para mi vida me hacen sentir menos?
Velas al viento y barco a la mar... tengo mi brújula y me tengo a mi mismo...
¿Quién necesita 10 millones de dólares?
Y ustedes? siguen queriendo algo más que los demás?
Saludos y Hasta la Próxima!!


